Esta entrada surge como respuesta al comentario de Salva Torres a la anterior sobre el tema. Lo normal hubiera sido responder a continuación y no redactar una nueva entrada pero dada la importancia del asunto he querido darle mayor relevancia con una nueva entrada para dar mayor difusión al debate.
El objeto de la discusión es decidir si la razón del comportamiento de la PAH se debe a la malicia o al error bienintencionado. Para Salva se trata de esto último, para él PAH sería un ejemplo más del principio de Hanlon. Este era también mi parecer cuando empece a colaborar con la PAH el 2011, pero dejó de serlo dos años después, ahora me decanto por la malicia.
Pero antes de entrar en lo que discrepamos quiero resaltar en lo que estamos de acuerdo ya desde el 2011 porque es más importante: La dación en pago, es contraproducente, un grave error, una lacra a erradicar, algo de lo que hay que huir como del veneno porque precisamente se trata de un regalo envenenado, una medida que beneficia a la Banca y perjudica a la gente.
Entrando ya en la discusión lo primero sobre lo que llamo la atención, es que el propio Salva Torres afirma que el comportamiento de la PAH alimenta todo tipo de elucubraciones, que el empecinamiento de la PAH con la dación en pago da mucho que pensar sobre los dirigentes de la PAH y que la posición ambigua de la PAH siembra muchas dudas sobre su financiación.
Si tú piensas esto, Salva, entonces implícitamente ya me has dado la razón aunque no quieras reconocerlo y prefieras concederle el beneficio de la duda a la PAH. Paso a explicarte el porqué. Dices que no podría probar en un juicio que la PAH trabaja para la Banca. Pero te equivocas con esta comparación, no en la afirmación porque efectivamente no podría probarlo en un juicio, pero sí al plantearla porque no estamos en un juicio sino en Política y aquí como en el resto de la vida las decisiones se toman sobre premisas distintas. En un juicio penal la prueba acusatoria ha de ser plena, es decir, debe existir seguridad absoluta sobre la culpabilidad. Sin embargo, en los juicios civiles, laborales y contenciosos-administrativos no es así, la prueba no ha de ser plena, no es necesaria la certeza absoluta sobre un hecho, aunque pueda sorprender es del todo punto lógico pues tiene en cuenta el coste de la prueba, la probabalidad de error, las consecuencias del error y la posibilidad de reparación del error. En un proceso penal no podemos permitirnos de ninguna manera condenar a un inocente y por eso se debe descartar el error al cien por cien. En un proceso civil si podemos permitirnos cierto margen de error y por ello es preferible aceptar una prueba con ese margen de error antes que asumir el coste de una prueba plena. Por las mismas razones en la vida cotidiana el aceptamos en nuestras decisiones un margen de error mayor. Cuándo elegimos pareja, aceptamos trabajo, firmamos una hipoteca o votamos a un partido o político, ¿podríamos probar en un juicio que son decisiones acertadas? No, no podríamos, pero tenemos que aceptar el riesgo de errar porque no tenemos medios para conseguir la prueba plena. Tu error, Salva, al plantear la comparación, es pretender que nos movamos en el mundo de las certezas absolutas cuando el mundo real es el de las certezas probables.
Además olvidas también que en Política se invierte la carga de la prueba, en un juicio penal el acusado no tiene que probar la inocencia sino que es el acusador quien tiene que probar su culpabilidad, pero en Política es el político quien tiene que probar su inocencia y no el acusador su culpabilidad. ¿Has olvidado que la mujer del César no solo tienen que ser honrada sino que además tiene que parecerlo? Y que sea así es muy razonable, te lo explico con un ejemplo. Imagínate que un trabajador quiere afiliarse a un sindicato para defender sus derechos y tiene que elegir cuál. Alguno de los sindicatos tienen fama de amarillos, hay indicios y sospechas razonables para considerar que en realidad trabaja para la Patronal, que son un falso amigo de los trabajadores, pero no hay ninguna prueba plena de ello, no se podría probar en un juicio penal que es así. No sería lo más razonable que ese trabajador descartase a esos sindicatos sospechosos de amarillismo. ¿Podrían estos sindicatos quejarse por la pérdida de afiliación que les causa su mala fama? No, pues son ellos quienes han de probar su inocencia y validez y no quienes les acusan de amarillismo la certeza absoluta de su culpabilidad, a estos les basta probar la verosimilitud de la acusación. Ahora con ejemplos concretos, si un trabajador tuviera la intención de afiliarse a UGT o CCOO, ¿no tratarías tú quitarle esa idea argumentando que trabajan para la Patronal? ¿Y acaso tienes tú la prueba plena que están a su servicio? ¿Podrías probarlo en juicio?
Si un deudor hipotecario tras acudir a la PAH y someterse a su lavado de cerebro, pretendiera conseguir la dación en pago, ¿no tratarías de persuadirle para librarle de tan disparatada idea y no le aconsejarías que no volviera por la PAH? Eso es porque tienes dudas respecto a la PAH, de hechos lo has dicho expresamente, y si dudas sobre ella es porque consideras verosímil que actúen con malicia aunque tú no quieras creerlo. Pero Salva, si lo ves verosímil aunque no lo creas ya estás en el mismo punto que yo, lo consideras culpables, porque esto no es un juicio penal, es Política. Si quieres lo podemos decir así, los consideras políticamente culpables aunque penalmente inocentes.
Cuando dices que mi denuncia no es creíble por extremista te contradices a ti mismo porque implícitamente con anterioridad has reconocido que es creíble al firmar lo dudoso del comportamiento de la PAH. Tú reconoces que es creíble pero también afirmas que no la crees, prefieres concederle en beneficio de la duda, prefieres tener fe en la honestidad y las buenas intenciones de la PAH. También dices: que “yo voté a BCNenComú y a la Colau.” Es lógico que lo hicieras ya que eres militante de Podemos y como resultado de la confluencia Ada Colau es tu jefa. Pero yo te pregunto, ¿no será que esta militancia te obliga a creer en la buena fe de la errada Ada Colau y su errada PAH?
También dices que Carlos Macías y Ada Colau tienen derecho a cobrar un sueldo por su dedicación a la defensa de los deudores hipotecarios. Estoy totalmente de acuerdo contigo. No podría no estarlo sin ser incoherente conmigo mismo, pues yo cobro honorarios por defender a deudores hipotecarios. Pero ¿por qué lo sacas a colación si yo no he dicho lo contrario? Yo no cuestiono que cobre un sueldo sino el oscurantismo sobre la procedencia del dinero, el oscurantismo sobre el pagador, el oscurantismo sobre sus jefes. A mí me pagan los deudores hipotecarios y por tanto está claro para quien trabajo. Pero ¿quién paga a los jefazos de la PAH y del Observatori DESC? ¿para quien trabajan realmente? No lo sabemos, entre otros motivos porque no hacen nada por aclararlo. Salieron en la prensa que recibían dinero del Ayuntamiento convergente de Barcelona y de los sindicatos UGT y CCOO. ¿Los sindicatos UGT y CCOO? estos ya han sido mencionados en esta entrada. Sí, son aquellos de los que no podemos probar que trabajan para la Patronal. Pues este oscurantismo sobre su financiación permite pensar que trabajan para la Banca o como dices tú alimentar la sospecha sobre sus verdaderas intenciones.
Tu respuesta Salva incurre en innumerables errores argumentativos, pero sería largo y tedioso desgranarlos uno a uno, así que me conformaré con enumerar algunos de ellos. Dices que crees en sus buenas intenciones porque los conoces desde su época de VdeVivienda. ¿Puedes probar que el hecho que tú los conozcas desde la época de VdeVivienda asegura sus buenas intenciones? Dices que mi postura es extremista, ¿puedes probarlo? Dices implícitamente que el extremismo es malo y que lo bueno es el término medio, ¿puedes probarlo? Por cierto, esto también lo decía Aznar, ¿recuerdas lo de en el centro está el futuro? Dices que denunciar el comportamiento de la PAH hace que los hipotecados atemoriza a los deudores hipotecados y hace que se echen en los brazos de la Banca, ¿puedes probarlo? Para mí que considero que la PAH objetivamente, es decir, con independencia de su intencionalidad, está trabajando para la Banca, lo que ayudaría a que permanezcan en la ignorancia y el miedo y se echen en los brazos de la Banca es no denunciarla, porque a eso se dedica la PAH, a meterles miedo en el cuerpo y sacar provecho de su ignorancia para convencerles de entregar su vivienda con la maldita dación en pago.
En fin Salva, tu entrada da para muchísimo, se puede abordar desde muchos aspectos y muchas cuestiones se me quedan en el tintero, pero un texto largo es desalentador y plantearlas en otras entradas, así que es mejor dejarlo aquí y acabar resaltando lo más importante, que estamos de acuerdo en que la dación en pago es una lacra con la que hay que acabar.